El poder de la IA destrona a Musk: Larry Ellison se convierte en el hombre más rico del planeta

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El auge de la inteligencia artificial (IA) no solo está transformando industrias enteras, también está reconfigurando el mapa del poder económico global. Este martes, Larry Ellison, fundador de Oracle Corporation, superó a Elon Musk y se convirtió en el hombre más rico del planeta, tras un espectacular repunte de las acciones de su compañía impulsado por contratos estratégicos en el sector de la nube y la IA.

De acuerdo con reportes financieros, Oracle experimentó un incremento sin precedentes en su valor de mercado gracias a su creciente papel como proveedor clave de infraestructura tecnológica para gigantes como OpenAI, Meta y Nvidia. Con ello, la fortuna de Ellison rebasó los 390 mil millones de dólares, dejando atrás a Musk, cuyo patrimonio personal había permanecido en la cima durante años.

La IA como motor del cambio

El factor determinante detrás de este reacomodo es la revolución en inteligencia artificial generativa. Mientras que Tesla y SpaceX han capitalizado innovaciones en transporte, energía y exploración espacial, Oracle se ha posicionado como un pilar esencial de la infraestructura digital que hace posible entrenar y desplegar modelos de IA cada vez más poderosos.

Analistas señalan que el negocio de Oracle Cloud Infrastructure (OCI) podría multiplicar hasta por siete sus ingresos en los próximos años, posicionando a la empresa como un competidor directo de Amazon Web Services, Microsoft Azure y Google Cloud, pero con una ventaja estratégica: su especialización en datos empresariales y la fiabilidad de su software histórico.

¿Y Musk? El costo de jugar en la política

El ascenso de Ellison también refleja un contraste con Musk. El empresario sudafricano no solo enfrenta la volatilidad de los mercados tecnológicos, sino también el desgaste generado por su incursión en la política a través de su gestión en X (antes Twitter). Sus declaraciones sobre temas electorales en Estados Unidos y sus enfrentamientos con líderes globales han restado confianza entre inversionistas, en un momento en que el capital prefiere certidumbre y apuestas a largo plazo como la IA.

En este sentido, algunos analistas ven el cambio de liderazgo en la cima de la riqueza mundial como un símbolo: el dinero fluye ahora hacia quienes dominan el ecosistema de la inteligencia artificial, más que hacia quienes concentran su poder en sectores de alta exposición política.

Un cambio de era

La caída de Musk en el ranking no significa el final de su influencia, pero sí evidencia una transición: la nueva fiebre del oro no está en los autos eléctricos ni en la conquista del espacio, sino en el control de los datos y la inteligencia artificial. Larry Ellison, que alguna vez fue considerado un “viejo titán” de Silicon Valley, representa hoy al empresario que supo adaptarse a las demandas de un futuro donde la IA es el nuevo campo de batalla global.

El desenlace deja abierta una pregunta: ¿será este el inicio de una era en la que los líderes de la IA desplacen a los visionarios de otras industrias en la cima del poder económico mundial?

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