Colima registra uno de los mayores aumentos en ingresos del país, según INEGI

Colima evidenció un avance robusto en su economía doméstica al registrar un ingreso corriente promedio trimestral por hogar de 86,241 pesos en 2024, superando ampliamente los 76,607 pesos de 2022. Este alza representa un crecimiento real cercano al 12.6 % en un solo año, notablemente superior al incremento nacional observado entre 2022 y 2024, que fue de alrededor del 10.6 %

En términos comparativos, el promedio nacional de ingreso corriente trimestral por hogar alcanzó 77,864 pesos en 2024, cifra que sitúa a Colima claramente por encima de la media

Claves del desempeño estatal

A pesar de no contar con grandes polos industriales, Colima ha reforzado sectores como el turismo, el comercio local y la agroindustria orientada a exportación, estrategias que han contribuido a la expansión del ingreso formal en los hogares.
La administración estatal ha apoyado firmemente a microempresas y programas de inclusión, lo que se refleja en una economía interna más equitativa y resiliente.
La participación del empleo formal y el acceso a transferencias sociales han permitido consolidar ingresos más estables entre la población colimense.

En el conjunto del país, los ingresos por trabajo representaron el 65.6 % del ingreso corriente total, seguidos por transferencias con el 17.7 %; La desigualdad entre hogares persiste: el décimo decil obtuvo ingresos trimestrales promedio de 236,095 pesos, mientras que el primer decil alcanzó solo 16,795 pesos, una brecha de 14 veces que sigue siendo la más pequeña desde 2016 (El País)

El notable desempeño económico de Colima refleja una gestión pública eficiente y una correcta articulación entre el gobierno estatal y las estrategias federales de inclusión social; El uso estratégico de los recursos de los Programas para el Bienestar ha fortalecido los ingresos de hogares más vulnerables, lo cual contribuye a cerrar brechas territoriales y de ingreso. El reto principal sigue siendo asegurar que este crecimiento se distribuya de forma equitativa en zonas rurales y deciles bajos, así como mejorar el acceso a servicios de salud y educación, áreas donde aún hay rezagos estructurales.

A pesar del avance en entidades como Colima, los datos nacionales reflejan contrastes notables. Mientras que Nuevo León alcanzó los 119 mil 033 pesos trimestrales por hogar, Chiapas y Guerrero reportaron los ingresos más bajos, con 41 mil 084 y 43 mil 485 pesos, respectivamente.

En el desglose por zonas urbanas y rurales, Colima también mantuvo una posición competitiva. Su ingreso urbano promedio fue de 103 mil 033 pesos, superior incluso al de entidades de mayor densidad poblacional, como el Estado de México o Veracruz.

Colima se posiciona como una entidad modelo en crecimiento económico familiar, superando el promedio nacional con una tasa de avance superior. Los datos evidencian una combinación exitosa entre impulso productivo local y apoyos sociales efectivos. Si se logra mantener esta dinámica con mayor equidad, el estado podría consolidarse como referente regional dentro del occidente mexicano.

El desempeño de Colima es una señal de estabilidad económica y una oportunidad para seguir consolidando políticas públicas orientadas al bienestar. El reto, advierten, será mantener esta tendencia ante un entorno global incierto, garantizar la redistribución equitativa del ingreso, y evitar que el crecimiento se concentre solo en ciertos municipios o sectores.

La Gobernadora del estado y los diez gobiernos municipales tienen ahora una ventana de oportunidad para profundizar estrategias de desarrollo con impacto regional, invertir en infraestructura social y fortalecer la educación y capacitación laboral.

Colima no solo avanza, sino que se posiciona como un referente de estabilidad económica en el país. El reto será sostener esta trayectoria y convertirla en una transformación social duradera.